El destino de los descartes generados durante la faena de pollo es un aspecto esencial de la industria avícola, que busca maximizar la eficiencia y minimizar el desperdicio.
En el caso de la avícola Fadel, se han implementado nuevas tecnologías en su planta de subproductos, inaugurada en enero de 2023, para transformar estos descartes en harinas y aceites que son utilizados en la fabricación de alimentos balanceados para animales.
La planta cuenta con tres líneas de producción independientes que procesan vísceras, plumas y sangre, resultando en un significativo volumen de productos que se envían tanto al mercado local como a la exportación. Estos procesos no solo generan un valor añadido a los subproductos, sino que también contribuyen a la sostenibilidad de la industria al asegurar que nada se desperdicie.
La producción diaria es notable: entre 17 y 18 toneladas de harina de vísceras, 7 a 10 toneladas de harina de plumas y 1,5 a 2 toneladas de harina de sangre, además de 9 a 10 toneladas de aceite. Es importante destacar que estos productos están destinados exclusivamente al consumo animal, lo que asegura que los subproductos sean utilizados de manera eficiente y responsable.
Con esta iniciativa, Fadel ha dado un paso importante hacia un modelo más sostenible y económicamente viable, transformando lo que antes era considerado un desperdicio en valiosos insumos para la industria de alimentos para mascotas y acuicultura.