Análisis completo y actual sobre el vínculo comercial entre Argentina y Brasil en el sector vitivinícola. Se refleja una tendencia muy clara y muy positiva para el vino argentino, y también para la industria vitivinícola regional en general.
Algunos puntos claves que me parecen muy relevantes para destacar:
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Brasil como segundo mercado para el vino argentino: Con un crecimiento del 14% en volumen y 22% en valor en el primer trimestre de 2025, Brasil no solo consume más, sino que también valora cada vez más la calidad y premiumización del vino argentino.
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Factores que impulsan el crecimiento: La apreciación del real, las tendencias hacia vinos blancos y espumosos, la demanda de variedades menos tradicionales (como Torrontés y Semillón), y el interés en vinos desalcoholizados por razones de salud.
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Estrategias de bodegas argentinas: Familias Millán y Carbonero Wines muestran dos modelos exitosos, con presencia sólida, red de importadores, estrategias para romper estacionalidad y apostar por categorías diversas.
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Acciones institucionales: ProMendoza y Wines of Argentina trabajan activamente en ferias, hub logísticos y contactos con supermercados para facilitar y ampliar la distribución.
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Expansión de la vitivinicultura brasileña: La concentración en Río Grande do Sul, pero también el desarrollo en estados como São Paulo y Bahía, y la entrada de grandes grupos brasileños en Mendoza (como Grupo Miolo) que acercan aún más ambos mercados.