La jornada a campo "Naredo INviTA", organizada por la Estación Experimental Agropecuaria Cesáreo Naredo del INTA junto con la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), tiene como objetivo principal brindar a productores, estudiantes y público en general de la región un conocimiento directo de la propuesta tecnológica del INTA en temas relacionados con ganadería, suelo, pastoreo y cultivos agrícolas. Este evento es fundamental para promover un uso más eficiente de los forrajes y así incrementar la producción ganadera.
María Coria, especialista en alimentación animal del INTA Naredo, enfatiza la importancia de conocer los recursos forrajeros utilizados como reserva para las diferentes categorías animales al planificar la alimentación. Destaca que estas reservas pueden tener una gran variabilidad nutricional debido a diversos factores, y es crucial tener en cuenta el estado del cultivo al momento de la confección o cosecha, así como otros aspectos como el tamaño de partícula, contenido de humedad, almacenamiento y formas de suministro.
Coria subraya que el criterio básico para utilizar estos recursos es conocer su calidad nutricional, incluyendo contenido de proteína, fibra, digestibilidad y energía. Por ejemplo, en el caso de los picados de cultivos de verano como el sorgo o maíz, el aporte proteico puede no ser alto, pero el aporte energético varía según el contenido nutricional del grano. Por lo tanto, es importante analizar la calidad de las reservas mediante muestras enviadas a laboratorio.
Además, Coria hace hincapié en la importancia de la sanidad de las reservas, ya que la presencia de hongos potencialmente tóxicos puede afectar la salud y el rendimiento de los animales, lo que conlleva pérdidas económicas significativas. También señala que el uso de reservas varía según los requerimientos nutricionales de cada categoría animal, por lo que es fundamental planificar una dieta balanceada que tenga en cuenta estos aspectos.
En resumen, la adecuada planificación y gestión de las reservas forrajeras, considerando su calidad nutricional, sanidad y requerimientos de las diferentes categorías animales, son aspectos clave para potenciar la producción ganadera y lograr un aumento en la ganancia de peso o carga animal.