
La Asociación Forestal Argentina (AFoA) reiteró su pedido a la Cámara de Diputados de la Nación para que mantenga la vigencia del Decreto N° 273/25, una medida que, según la entidad, resulta esencial para garantizar la modernización tecnológica y la competitividad de las pequeñas y medianas empresas del sector forestal.
El decreto en cuestión habilita la importación simplificada de maquinaria usada, una herramienta que las pymes consideran vital ante la profunda obsolescencia del parque industrial en los aserraderos y plantas de procesamiento del país.
La AFoA advirtió que el proyecto de ley que busca derogar dicha norma y reinstaurar el Certificado de Importación de Bienes Usados (Cibu) implicaría un retroceso para el sector, reintroduciendo trabas burocráticas que ya demostraron ser un obstáculo para la renovación productiva. “Este decreto es una herramienta estratégica para abordar la crítica situación de obsolescencia tecnológica que afecta a miles de pequeñas y medianas empresas. En el caso del sector forestal, la antigüedad promedio de los equipos ronda los 40 años, lo que limita la eficiencia, la seguridad laboral y la competitividad internacional”, señaló la asociación en un comunicado oficial.
Desde la entidad explicaron que el acceso a maquinaria usada de calidad representa una vía de modernización gradual: muchas pymes encuentran en esta posibilidad el primer paso hacia la incorporación de procesos más eficientes y, posteriormente, hacia la adquisición de equipos nuevos. “Para una pyme, poder acceder a tecnología usada en buenas condiciones puede significar un salto en productividad, reducción de costos operativos y mejora en la seguridad de los trabajadores. Es un proceso de inclusión tecnológica que les permite competir en igualdad de condiciones con empresas más grandes o con capital extranjero”, destacó la organización.
AFoA también subrayó que esta política tiene un efecto positivo sobre el mercado interno, ya que contribuye a reducir los sobreprecios en la venta de equipos usados nacionales, generados por la falta de oferta y la escasa competencia. Al ampliar las opciones de compra, se corrigen distorsiones y se estimula la inversión privada en tecnología.
Asimismo, la entidad remarcó que la norma actual no implica una apertura indiscriminada, sino un mecanismo controlado y pragmático que favorece la renovación industrial sin eliminar los estándares técnicos ni los controles de seguridad. Estos controles —según AFoA— se verifican al ingreso y en destino, garantizando la seguridad industrial sin obstaculizar los procesos de importación.
Finalmente, la asociación hizo hincapié en que sostener el Decreto 273/25 significa apostar por la productividad, el empleo y el desarrollo de las economías regionales. “El desafío es fortalecer a nuestras pymes, no limitarlas. Cada equipo que se renueva representa más eficiencia, más empleo y más valor agregado en origen. Mantener este decreto es apostar al futuro de la foresto-industria argentina”, concluyó la AFoA.