
El informe de la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) destaca un patrón climático variado en la región, donde las lluvias recientes beneficiaron a Córdoba y Santiago del Estero, pero dejaron al sur de Buenos Aires prácticamente sin precipitaciones.
Detalles principales:
Córdoba y Santiago del Estero: Las lluvias acumuladas recargaron de manera significativa los perfiles de agua en los lotes de trigo, con variaciones positivas en el contenido de agua útil que superan el 25%. Sin embargo, en estas áreas, el período clave para definir el rendimiento del trigo ya ha pasado, lo que significa que aunque las lluvias ayudan, no podrán revertir totalmente el impacto de la sequía previa.
Buenos Aires (sur): La falta de precipitaciones fue más crítica en esta zona triguera, con un desecamiento severo en el contenido de agua útil, disminuyendo entre un 25% y un 50%. Aunque las condiciones del cultivo aún son aceptables, el rendimiento del trigo podría verse comprometido si no se reciben lluvias en las próximas semanas, dado que se está entrando en el período decisivo para definir los rendimientos.
Este tipo de informes refleja la importancia de la gestión del agua y las lluvias en la agricultura, particularmente en cultivos clave como el trigo, que dependen de perfiles de humedad adecuados para asegurar buenos rendimientos.