
La Mesa Argentina de Carbono (MAC) impulsa una estrategia integral para que Argentina lidere la oferta de créditos de carbono en la región y transforme este nuevo sector en un motor de desarrollo económico, social y federal.
En este marco, la MAC celebró el reconocimiento internacional obtenido por el proyecto “Selva Paranaense Vida Nativa – GS1”, desarrollado por la empresa argentina Nideport, que fue recientemente certificado por Verra, uno de los estándares más prestigiosos del mundo en materia de carbono. El proyecto obtuvo 138.000 créditos de carbono y alcanzó el nivel más alto de reconocimiento —CCB Gold Label (Climate, Community & Biodiversity, Nivel Oro)— por su impacto positivo en el clima, la comunidad y la biodiversidad.
Este logro representa un avance significativo para el país, ya que posiciona a Argentina como un referente regional en el desarrollo de proyectos de carbono de alta calidad, con beneficios ambientales, sociales y tecnológicos tangibles.
Gracias a este tipo de iniciativas, el país cuenta hoy con una oportunidad histórica: transformar su vasto capital natural y productivo en una fuente estratégica de generación de divisas, inversión, empleo y reputación internacional, consolidando un modelo de crecimiento verde basado en la conservación y la innovación.
Un modelo de restauración con impacto real
El proyecto Selva Paranaense Vida Nativa – GS1 se ubica en la provincia de Misiones, en una zona de más de 22.800 hectáreas pertenecientes a la Selva Atlántica, uno de los ecosistemas más biodiversos y amenazados del planeta. Su objetivo es la restauración ecológica y el manejo forestal sostenible, combinando prácticas de conservación con la participación activa de comunidades locales y la generación de empleo verde.
A través de técnicas de restauración forestal, monitoreo de biodiversidad, control de especies invasoras y manejo sustentable de recursos, el proyecto busca recuperar la funcionalidad ecológica del paisaje, mejorar la captura de carbono y fortalecer las economías circulares locales. Además, promueve la inclusión de comunidades indígenas y rurales, fomentando un modelo de desarrollo territorial más equitativo y sostenible.
Uno de los ejes diferenciales de Vida Nativa es su compromiso con la conservación de la fauna autóctona. El proyecto protege 56 especies de animales nativos, de las cuales 10 se encuentran en peligro de extinción en Argentina, entre ellas el yaguareté, la yacutinga, el tapetí y el sapito panza roja. Estas acciones de conservación incluyen monitoreos permanentes, restauración de hábitats y la creación de corredores biológicos que conectan áreas fragmentadas de selva.
Compromiso con las comunidades locales
El proyecto se desarrolla en proximidad con la comunidad indígena Tekoa Alecrín, con la cual se llevó a cabo una Consulta Previa, Libre e Informada (CPLI), conforme a los estándares internacionales de respeto a los derechos de los pueblos originarios. Este proceso permitió establecer un diálogo abierto y colaborativo, asegurando que las prácticas del proyecto respeten la cultura, las tradiciones y la estructura social de la comunidad.
Además, se implementaron programas de mejora de las condiciones de vida, capacitación en prácticas sostenibles, empleo local y desarrollo de emprendimientos comunitarios vinculados al turismo ecológico, la producción artesanal y la recolección sustentable de recursos forestales no madereros.
Tecnología e innovación para la transparencia
Nideport incorporó herramientas tecnológicas avanzadas para garantizar la transparencia, trazabilidad y eficiencia del proyecto. A través de una plataforma de monitoreo forestal que utiliza inteligencia artificial y drones autónomos, se pueden medir en tiempo real los indicadores ambientales, la regeneración de la vegetación, el crecimiento del carbono capturado y el impacto social. Esta digitalización del monitoreo representa un salto cualitativo en la gestión de proyectos de carbono, fortaleciendo la confianza de inversores y certificadores internacionales.
Un paso hacia el liderazgo argentino en mercados de carbono
La certificación bajo los estándares Verra VCS y CCB Gold Label convierte al proyecto Selva Paranaense Vida Nativa – GS1 en el primer proyecto argentino de manejo forestal mejorado certificado internacionalmente, marcando un hito para el país y para la región. Este reconocimiento demuestra que Argentina tiene la capacidad de combinar innovación tecnológica, conservación ambiental y desarrollo social, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y los compromisos asumidos en el Acuerdo de París.
Desde la Mesa Argentina de Carbono, destacaron:
“Cada nuevo proyecto certificado refuerza el potencial de Argentina para liderar los mercados de carbono en América Latina, atraer inversión verde y construir un futuro más sostenible y federal para todos”.
Mirando hacia el futuro
El éxito de Vida Nativa sienta las bases para la expansión del modelo. Nideport ya evalúa más de 2 millones de hectáreas en distintos países de América Latina con la meta de restaurar 45 millones de hectáreas para 2035, posicionando a Argentina como epicentro regional de soluciones basadas en la naturaleza.
Este proceso no solo fortalece la economía verde, sino que también impulsa la generación de conocimiento, empleo calificado, innovación tecnológica y valorización del patrimonio natural del país. Así, Argentina se proyecta como un actor estratégico en la lucha contra el cambio climático y en la construcción de un nuevo paradigma económico sustentable, inclusivo y federal.