El sector lácteo de la provincia de Córdoba atraviesa una de las crisis más profundas de los últimos años, marcada por una combinación de factores económicos, productivos y de mercado que están poniendo en riesgo la continuidad de numerosas pequeñas y medianas industrias.
La Asociación de Pymes Lácteas de la Provincia de Córdoba (Pylacor) emitió un comunicado en el que advierte sobre una “situación sumamente compleja e insostenible”, que compromete no solo la viabilidad de las empresas del rubro, sino también el entramado económico y social de gran parte del interior provincial.
De acuerdo con la entidad, la problemática tiene múltiples causas interrelacionadas. En primer lugar, las pymes señalan el fuerte aumento de los costos de producción, tanto en insumos industriales como en energía, combustibles y servicios logísticos. A esto se suma el encarecimiento de la materia prima, ya que los litros de leche remitidos por los tambos se han incrementado de manera “muy considerable” en su valor, presionando sobre los márgenes de rentabilidad de las fábricas.
Sin embargo, uno de los aspectos más críticos es la imposibilidad de trasladar esos aumentos de costos a los precios finales de los productos. La asociación destaca que la estructura de precios del mercado interno se encuentra “totalmente desfasada” respecto de la realidad de los costos, debido a un consumo deprimido y a una caída general del poder adquisitivo de la población. Esto genera una brecha creciente entre el precio de venta y el costo real de producción, dejando a muchas empresas operando con márgenes negativos.
Otro de los puntos señalados por Pylacor es la profunda retracción del mercado interno, que se traduce en una acumulación de stocks de productos elaborados, especialmente quesos. A pesar de que algunas industrias han intentado reducir precios para estimular la demanda, la respuesta del mercado ha sido prácticamente nula, lo que —según la entidad— “desconoce las leyes básicas de la oferta y la demanda”. Como consecuencia, se ha generado un excedente de quesos muy considerable, que no solo ocupa espacio de almacenamiento, sino que también deteriora el capital de trabajo y la capacidad financiera de las empresas.
Pylacor advierte que esta coyuntura impacta de manera directa en la economía regional, ya que las pymes lácteas son uno de los principales motores de las economías de pueblos y ciudades del interior cordobés. En muchas localidades, estas industrias representan una de las principales fuentes de empleo y de circulación de recursos, por lo que su debilitamiento tiene efectos multiplicadores negativos sobre el comercio, los servicios y el nivel de actividad general.
Ante este panorama, la asociación reclama medidas urgentes y serias por parte del gobierno nacional, orientadas a estabilizar la economía y ofrecer herramientas de financiamiento y alivio fiscal que permitan a las empresas sostener la producción y el empleo. Asimismo, pide a los gobiernos provinciales y municipales que acompañen de manera activa al sector, interiorizándose en la problemática y promoviendo políticas de apoyo específicas.
Por último, Pylacor hace un llamado a las organizaciones gremiales de los trabajadores para que comprendan la gravedad de la situación y colaboren en la búsqueda de soluciones conjuntas que eviten el cierre de plantas y la pérdida de puestos de trabajo. En palabras de la entidad, se trata de un momento en el que “la supervivencia de las pymes lácteas depende del compromiso y la responsabilidad de todos los actores involucrados”.