El ministro de Economía, Comercio y Empresa de España, Carlos Cuerpo, ha defendido el acuerdo entre la UE y Mercosur, asegurando que el impacto para el sector agrícola y ganadero europeo, en especial el español, será mínimo.
En una declaración reciente, Cuerpo aseguró que la importación de carne de vacuno será limitada, ejemplificando que la UE importará solo "un filete de vacuno por persona al año". Esta cifra subraya el bajo impacto que tendría este acuerdo en la producción local de carne, dado que la población de la UE ronda los 500 millones de personas. En términos de cantidad, esto implicaría entre 100 y 125 millones de kilos de carne importada, una cifra pequeña en comparación con la producción anual de la UE y España (6,8 millones y 700.000 toneladas de carne de vacuno, respectivamente).
Sin embargo, la postura de Cuerpo ha generado desacuerdo en sectores agrarios de España, que consideran que este acuerdo no contempla medidas suficientes para proteger al sector agrícola y ganadero local. La organización Unión de Uniones ha expresado su preocupación por la competencia desleal que podría generarse si el acuerdo no incluye "cláusulas espejo", que garantizarían la igualdad de condiciones para los productos europeos y los importados. Además, critican la contradicción de la UE al promover la seguridad alimentaria y la protección de la salud, mientras firma acuerdos que, según ellos, ponen en riesgo esos valores.
En resumen, mientras el ministro Cuerpo defiende que el impacto del acuerdo será mínimo y que el sector europeo estará bien protegido, las protestas del sector agrario español subrayan la necesidad de más medidas de protección para evitar un perjuicio significativo en la producción local