Parece que hay un panorama interesante en el mercado de fertilizantes, con una mezcla de estabilidad de precios y cambios en la demanda.
La reducción en la demanda para la cosecha fina y la caída en la superficie de siembra de maíz son factores a tener en cuenta, especialmente con el impacto de las lluvias recientes que han beneficiado la siembra de maíces tempranos en algunas provincias.
La información sobre la demanda y las importaciones acumuladas de fosfatados y nitrogenados también resalta la necesidad de adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado, especialmente con la disminución en la superficie sembrada de maíz. La situación de la UREA, que representa una gran parte de la demanda, y la producción local constante, también es un factor a tener en cuenta para el futuro cercano.
El incremento en las importaciones de MAP y DAP indica una respuesta a la demanda, a pesar de la disminución en el uso para la fertilización de trigo y la caída de superficie sembrada. También es notable que la eliminación del Impuesto PAIS podría motivar a los importadores a hacer acopio antes de fin de año, lo que podría alterar el flujo habitual de importaciones.